Dentro de todos los complejos que puedan existir he aprendido a valorizarme tal y como soy. Me he auto-enseñado a no ubicarme en el lugar de verme menos de lo que Dios dice que soy.
¡Sí…! ¡Tengo tanto por alcanzar y sueños sin realizar! En ocasiones cuando miro a otras mujeres que admiro, podría ubicarme en la posición de compararme y entrar en un pensamiento destructivo, pero decidió acordarme que no soy ella. “Soy suficiente porque sé cuál es mi proceso y estoy aprendiendo día a día”.
- Cuando los nenes están dormidos y mi esposo en el 5to sueño comienzo a preguntarme, ¿Soy Suficiente?
- Cuando ya son las 5:00 a.m. y no he logrado salir de la cama para conectarme con Dios, ¿Soy Suficiente?
- Cuando los nenes llegan de la escuela y no alcanzo tener la comida hecha, ¿Soy Suficiente?
- Cuándo preparé todo para una noche de películas y compartir con mi esposo, pero me quedo dormida, ¿Soy Suficiente?
Esa es la pregunta que constantemente nos hacemos cuando no cumplimos con los requisitos que nos implantamos para hacernos pensar que si los realizamos somos suficientes. ¡Oye! “Tengo una larga lista de todas las cosas que quiero mejorar y perfeccionar comenzando con llamar a mi mamá todos los días” comunicarme con viejas amistades y preguntarles ¿Cómo te va? o sencillamente proponerme no comer tantos waffles
Pero… y que cuando sí logre tener la comida a tiempo, o sí logre sobrevivir despierta la noche de películas. Qué tal cuando no me levante a las 5:00 a.m. pero a las 4:00 a.m. y fue una mañana gloriosa en la presencia de Dios, AHORA ¿Sí soy suficiente?
NO soy perfecta, No he logrado alcanzar todos mis sueños pero sabes que…
Me encantan las aventuras, amo todo lo que me rete. Soy fan de la historia. No amo las matemáticas, pero amo el juego 24. Amo sinceramente y me apasiona inspirar a otros. En ocasiones soy extremadamente olvidadiza. Me gusta guiar lento y danzo mientras guío. Soy fiel creyente en la INTEGRIDAD. No vivo por la aprobación de otros. Me asfixio si veo a alguien aguantando la respiración. Tiemblo antes de cada predicación. Y dentro de mis altas y bajas ¡SÍ…! ¡SOY SUFICIENTE!
Para aquellos hombres con piedras en mano dispuestos a terminar con la vida de esa prostituta para ellos ella NO era suficiente. Pero Jesús entra a la escena y le acuerda eres suficiente NO porque tienes todo bajo control sino porque Yo estoy en control.
“Al oír esto, uno tras otro comenzaron a irse, y los primeros en hacerlo fueron los más viejos. Cuando Jesús se encontró solo con la mujer, que se había quedado allí, se enderezó y le preguntó: —Mujer, ¿dónde están? ¿Ninguno te ha condenado? Ella le contestó: —Ninguno, Señor. Jesús le dijo: —Tampoco yo te condeno; ahora, vete y no vuelvas a pecar.”
San Juan 8:9-11 DHHDK
Entonces decláralo todos los días. Acuérdatelo cada mañana y cada noche.
One Response
Dios le bendiga pastora, me gustó mucho su post. Esa voz o sentir de que no somos suficiente no proviene de Dios. No debemos de olvidar que el solo hecho de que Dios nos ha escogido seremos suficiente porque Dios no se equivoca. El que nos llamó nos preparará para ser suficiente. Nuestros esfuerzos deben estar dirigidos en obedecer a Dios, hacer un verdadero compromiso con Dios y establecer a Dios como nuestra prioridad. Todo lo demás lo hace Dios.